¿Por qué tu gato siempre maúlla?

1. Acaban de traer al gato a casa.

Si acaban de traer un gato a casa, seguirá maullando por el miedo inquietante de encontrarse en un entorno nuevo. Todo lo que necesitas hacer es deshacerte de los miedos de tu gato. Puedes rociar tu casa con feromonas felinas para que se sienta segura. Además, también puedes consolar al gato, jugar con él, darle deliciosos snacks para ganarse su confianza, y luego abrazarlo, tocarle la cabeza para que no tema. También puedes preparar una pequeña habitación oscura para que tu gato la evite en casa, deja que tu gato se esconda en ella y se adapte poco a poco al nuevo entorno.

 2. No se satisfacen las necesidades físicas

Cuando un gato siente hambre, frío o se aburre, seguirá maullando, intentando con ello llamar la atención de su dueño. Suele ser muy suave. En este momento, es necesario que el dueño de la mascota alimente al gato de manera regular y cuantitativa, lo mantenga abrigado para no resfriarse y pase más tiempo con el gato.

3. Tu gato no se siente bien

Cuando el gato está enfermo, el cuerpo tendrá dolor, malestar y otras sensaciones incómodas. En este caso, es necesario prestar más atención a su gato, observar si presenta vómitos, diarrea, pérdida de apetito y otros síntomas anormales. Si se observan estos síntomas, el dueño de la mascota debe llevar al gato al hospital de mascotas lo antes posible para que lo examinen y le traten.